martes, 3 de mayo de 2016

CUENTO: "LA TRAMPA CON PREMIO"

Había una vez dos calcetines llamados Pablo y Elena.
Vivían en el palacio de los calcetines, llamado Cenota y eran los reyes de el país Calrep. 
Elena era muy alegre, rosada y con líneas.Su pelo era de color azul con mechas rojas y liso. Era amable y una buena reina. También llevaba siempre en su pelo una fantástica corona de oro, por ser la reina y porque era muy bonita. Pablo era un poco gruñón pero muy simpático. Era de color negro. Tenía el pelo ondulado y con los colores negro y rojo. Era muy buen rey como Elena. A los dos les gustaba comer pollo al curry con una pizca de algodón mágico. Su palacio era muy grande de color dorado y azul. Tenía esculturas, cuadros,jarrones…
Un día vinieron sus amigos lejanos que también eran calcetines. Se llamaban Carla y Kostia. Ellos se sabían su gran secreto, ese era que les daba miedo meterse en las lavadoras. Ellos eran malvados,pero Elena y Pablo no lo sabían. Les dijeron que se fuesen de vacaciones y que ellos se las pagaban. Después prepararon las maletas y se fueron. Lo que ellos no sabían es que en ese sitio había una lavadora. Se alojaban en el hotel Say donde había piscina, Spa, gimnasio, minigolf … Al día siguiente fueron a la playa y vieron a sus amigos.
-¿Qué haceis aquí?-les preguntaron Pablo y Elena.
-Hemos venido a veros-respondieron Kostia y Carla.
-Genial-dijeron Pablo y Elena.
-También nos hemos alojado en el hotel Say-dijeron Carla y Kostia.
Después visitaron un castillo medieval de algodón de azúcar que estaba cerca del hotel. El castillo era de color azul y rosa. Tenía un calabozo subterráneo. También contenía unas increibles habitaciones de estilo romano. Arriba del castillo había una torre de lana. Era de color plateado y muy brillante. El castillo tenía muchas cosas de valor; por ejemplo un cofre que no se puede abrir que dicen que contienen todas las riquezas del castillo. Visitaron muchos sitios más como La casa de la esmeralda, Naranja de circo y Cineal. 
Pablo tenía una idea. Como él  todavía no se había casado con Elena se lo iba a pedir. Llegó el gran día, se lo pidió en el castillo medieval con el suelo lleno de pétalos de rosas. Elena llego por una nota de Pablo y vio todo el suelo del castillo lleno de pétalos de rosa. Vino a los dos segundos muy elegante y con una música de fondo. Cuando llegó hasta donde estaba Elena, con una rosa en la mano, le hizo la gran pregunta:
-¿Elena, te quieres casar conmigo?
-Pues no sé.
-Te dejo tiempo para pensarlo-dijo Pablo.
-Era una broma claro que sí-le dijo Elena.
-¡Estupendo!-exclamó Pablo.
-¿Y dónde nos casaremos?-preguntó Elena.
-Pues no sé, ya lo pensaremos, pero eso no es lo más importante-dijo Pablo.
Al siguiente día encontraron un sitio para casarse pero ya estaba reservado así que tuvieron que buscarse otro. Sus amigos querían sacarles el dinero y  gobernar el mundo con su sed malvada. Por eso ellos les buscaron el sitio de la boda y se casaban el día siguiente. Se casaban en una iglesia rústica decorada de lana y oro blanco con una luna y un sol. Elena llevaba un precioso vestido beige y Pablo un esmoquin negro con una orquídea que era la flor favorita de Elena. El señor Jiménez que era el cura los casó.
 La lavadora estaba escondida diciendo que era una atracción. Les regalaron sus mejores amigos Carla y Kostia un bono para la atracción de  la flor (la lavadora).
-Yo quiero subirme y encima es gratis por nuestros amigos-dijo Elena.
-Pero cielo, me dan miedo las atracciones-dijo Pablo.
-Ese miedo lo tienes que superar cariño-dijo Elena.
-Bueno lo intentaré-respondió Pablo.
Se subieron y Pablo descubrió que no le daba miedo la atracción que en realidad era una lavadora. Al final descubrieron que eso no era una atracción sino una lavadora. A sus ex-amigos los metieron en la cárcel de lana por incumplir la ley de los calcetines que era: los actos malos deben ser eliminados. Y Pablo y Elena vivieron felices y comieron perdices.

Autoras: Angelina y Paula

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